Desde este lunes la Ciudad le cobrará $1.400 a los turistas extranjeros y $700 a los argentinos que visiten el cementerio. Más de 90 bóvedas fueron declaradas Monumento Histórico Nacional
El gobierno de la ciudad de Buenos Aires comenzó este lunes a cobrar entrada, tanto a turistas extranjeros como nacionales, que quieran visitar el Cementerio de la Recoleta. La medida dispuesta por el gobierno que encabeza Horacio Rodríguez Larreta provocó un fuerte rechazo entre los operadores turísticos porteños agrupados en la Asociación de Agencias de Viajes y Turismo de Buenos Aires (Aviabue).
Más de 90 bóvedas de la Recoleta fueron declaradas Monumento Histórico Nacional a lo largo del tiempo y en ese cementerio se hallan además las tumbas de reconocidas personalidades de la historia como Eva Perón, Raúl Alfonsín y Arturo Illia.
Ahora, quienes pretendan disfrutar de las visitas guiadas que se hacen dentro del cementerio deberán pagar $1.400 (extranjeros) o $700 los argentinos.
Solo quedaron exceptuados de la ley 4.977 y por lo tanto no tendrán que pagar para el ingreso, los jubilados, los estudiantes de todos los niveles de los establecimientos educativos dependientes del Gobierno de la Ciudad y quienes quieran visitar el cementerio de forma individual y no a través de una visita guiada.
Tras conocerse la nueva normativa, Mario Ijelman, presidente de la Aviabue, consideró que “el costo de entrada es discriminatorio, porque el público que va por la calle no paga nada, mientras que a quien va con guía se le cobra”.
Advirtió además que hubo poca anticipación para anunciar la medida: “Nos avisaron siete días antes de su implementación. Ya tenemos muchos tours vendidos hasta fin de año, o las tarifas ya publicadas, y ahora los operadores deberemos absorber ese costo”.
Tras estos reclamos, se dispuso que tanto las agencias de turismo como los guías independientes que ya tuvieran contratadas reservas de grupos de turistas para visitar la reconocida necrópolis porteña podrán hacerlo de manera gratuita hasta el próximo 17 de abril.
Según explicaron desde el área de Participación Ciudadana, el cobro de la entrada al cementerio de la Recoleta se basa en la puesta en marcha de un plan de mejoras en la infraestructura de los cementerios porteños. Entre estas obras destacaron la puesta en valor del panteón del cementerio de Flores y diferentes refacciones en la galería de nichos en Chacarita. También se renovará la cartelería orientativa de las necrópolis de la Ciudad.
