En esta línea, Gallo comentó que “ayer tuvimos el vuelo inaugural, hoy tuvimos el segundo y a partir de la próxima semana tendremos uno diario. Luego del segundo semestre conectará Miami con Río Grande, garantizando los insumos industriales”.
“También puede ir a la Antártida. Nos pone un escalón más arriba de Chile, ya que ellos hacen abastecimiento estando más lejos. Nosotros podríamos hacerlo, estando más cerca”, destacó.
Asimismo, el empresario afirmó que “el primero llegó en estos días, el otro llegará en julio. Son 2 Boeing 737, ambos pueden transportar 24 mil kilos y no tienen limitaciones. En Tierra del Fuego tendrá la función de abastecer la industria del celular. El avión empezó a operar ayer. Luego del segundo semestre tendremos 2 vuelos diarios”.
También explicó que Aerolíneas del Sur se ocupa de “la parte operativa y comercializadora del avión. Tenemos la relación comercial con la industria. Empezamos en el 2012, cuando el 80% de los celulares se transportaban por camión. Hoy tenemos un amplio porcentaje que se transporta por operación aérea. Ofrecemos tener un producto en 3 horas en Buenos Aires”.
Consultado por el proceso de carga, comentó que “por una cuestión aduanera, la carga se toma de la industria; se lleva al hangar de Río Grande; se coloca en pallets de avión; se deja todo preparado; llega el avión y se pone todo en una máquina que lo carga en el avión. La nave demora una hora desde que aterriza hasta que se termina la carga. Es más rápido que la carga de pasajeros”.
Y aclaró que los vuelos se hacen “de noche porque es la ventana que encontraron Aerolíneas y la industria para que lo que se produjo a la tarde ya esté en Buenos Aires a la mañana siguiente. Además, la cuestión operativa del aeropuerto de Río Grande no permite que opere en el mismo horario que los vuelos de pasajeros”.
“A la vuelta desde Ezeiza trae insumos de una reconocida marca de celulares que hace el grupo Mirgor”, contó.
Por último, se refirió al proyecto del grupo Mirgor para realizar el puerto de Río Grande y aseguró estar “convencido de que se va a dar. Si uno mira Tierra del Fuego desde afuera y ve que tiene puerto en Río Grande y en Ushuaia, conectividad aérea y de tierra, da cuentas de un potencial enorme”.
“Este proyecto puede cambiarle la cara a Río Grande, por la generación de puestos de trabajo y la reducción de costos. Abre un enorme abanico de posibilidades”, cerró.
Respecto a la utilidad de las naves, Gallo precisó que, por ahora, “transportarán celulares. Eso hace que para la empresa sea mucho más competitivo el traslado. En 3 horas el producto terminado está en Buenos Aires. Esto da valor agregado a la industria fueguina. No es lo mismo tener una logística por camión a tener una por vía aérea”.
