¿Por qué los niños adoran a Blippi?
Blippi es un hombre vestido de forma extravagante. Es un tipo hiperactivo, lleno de energía, con un entusiasmo contagioso. Canta y baila, no para de hablar y de hacer cosas ante la cámara. Para los adultos, puede parecer un personaje un poco tonto, pero no hay que perder de vista que sus vídeos no están pensados para un público adulto, sino para niños. Y a ellos les encanta. No hay duda de que Blippi conecta de un modo especial con los más pequeños de la casa.
Sin embargo, los videos de Blippi no son solo divertidos, sino también educativos. En ellos encontramos muchas aventuras en lugares como zoológicos, acuarios, museos de ciencia, granjas y fábricas, donde se transmite a los niños todo tipo de conocimientos, desde el funcionamiento del motor de un coche hasta los peligros del cambio climático. También hay líneas rojas: religión y política. A los responsables de estos vídeos les preocupa mucho que Blippi sea un lugar seguro para las mentes de los niños y en el que los padres puedan confiar completamente.
Stevin John, el creador de Blippi
El hombre que está detrás del personaje se llama Stevin John, tiene 30 años y vive en Las Vegas. Tiene pareja, pero curiosamente no tiene hijos. Sin embargo, comparte muchos de los rasgos de la personalidad de su alter ego: es divertido, amable, atractivo y desinhibido.
De soldado a estrella de YouTube
Originalmente John empezó a realizar sus vídeos completamente solo, sin ayuda de nadie. Ahora en cambio cuenta con un gran equipo de profesionales que se encarga de mantener a su público contento, con nuevos y coloridos vídeos musicales que hablan de tractores, camiones de basura, patios de juego o coches de policía, por ejemplo.
Sin embargo, de convertirse en Blippi, Stevin John se dedicaba a un trabajo muy diferente, bastante alejado del mundo infantil. Después de graduarse de la escuela secundaria en 2006 se alistó en el Ejército de los Estados Unidos. Su gran ilusión era convertirse en piloto de combate, pero cuando estuvo metido de lleno en la vida militar, sometido a la férrea disciplina del soldado, se dio cuenta de que aquello no era para él. Así que decidió dejarlo, se mudó a Los Ángeles y allí trató de reconducir su carrera profesional dentro del mundo audiovisual.
Su sobrino, su gran inspiración
Fue en esa época cuando su hermana se quedó embarazada y finalmente tuvo un bebé. Aquel niño, que convirtió a John en tío, se convirtió en una inspiración para él. Su madre ponía al pequeño vídeos de YouTube para entretenerle, pero en aquel entonces no había contenidos de calidad ni vídeos que lograran captar la atención del niño. Por suerte, él sí sabía lo que su sobrino necesitaba para divertirse, jugar y aprender. Y así nació Blippi.
El primer vídeo se grabó en enero de 2014. Aquellos primeros vídeos, en los que Blippi lucía su traje azul y el sombrero original, no tardaron en triunfar y pronto registraron cientos de miles de visitas. La clave del éxito: ni siquiera el propio John lo sabe a ciencia cierta, aunque se inclina a pensar que el secreto está en la intuición de los niños, su capacidad creativa y su inteligencia, aspectos no siempre valorados en su justa medida (ver 20 claves para fomentar la creatividad de los niños). John, que reconoce ser un “niño grande”, sabe cómo conectar con las mentes infantiles. Hace lo que le gusta y se divierte con este trabajo.
El éxito de Blippi
Actualmente los vídeos de Blippi en YouTube cuentan las visitas y los “me gusta” por millones. Este personaje ha barrido literalmente el mercado infantil en la plataforma de videos más popular del mundo. Los expertos creen que, además del carisma del propio personaje y de su creador, el éxito de Blippi reside en el cuidado y la selección de los contenidos, específicamente orientados a los niños durante sus etapas fundamentales de desarrollo. Todo un acierto.
El genio creativo de Stevin John ha logrado crear una marca y generar unos ingresos de millones de dólares. Según los datos que facilita YoutubeList, el canal de Blippi genera unosingresos de alrededor de 322.000 euros al año, con un aumento de nada menos que 15.000 nuevos suscriptores cada mes.
Desde una perspectiva estrictamente de marketing, Blippi es un caso único. Y la historia no se termina aquí: entre los próximos proyectos de Blippi hay que destacar una aplicación para smartphone y el más que probable salto a la plataforma Netflix, además de un montón de ideas de merchandising.
