Apple presentó este martes el iPhone “X”, que se pronuncia “diez”, un smartphone casi sin bordes, con pantalla en toda su superficie delantera y que se desbloquea por reconocimiento facial.
El modelo, lanzado en el décimo aniversario del mítico celular, es más rápido y potente que los otros iPhones.
“Va a marcar el camino de la tecnología en el próximo decenio”, dijo Tim Cook, quien aseguró que constituye “el más grande avance después del iPhone original” lanzado en 2007.
El nuevo iPhone X ya no trae el botón de inicio que revolucionó los teléfonos inteligentes cuando se lanzó, ofrece una pantalla infinita y usará el reconocimiento facial (Face ID) para desbloqueo.
“No hay sistemas 100% seguros”, explicó Apple en su presentación, al tiempo que reconoció que “las posibilidades de engañar a Face ID son de una en un millón”.
El nuevo celular es resistente al agua y se podrá cargar de manera inalámbrica. Además, tiene una cámara doble de 12 megapixeles, ambas con estabilización óptica.
El dispositivo completa sus características con un procesador Apple A11 de 6 núcleos, 3 GB de RAM y una nueva pantalla con tecnología Super Retina HD Display (OLED).
La nueva “joya” de Apple saldrá a la venta el 3 de noviembre, en dos versiones (64 y 256 GB de almacenamiento) y su precio comenzará en USD $999.
