La hipocresía política tiene ribetes inusitados, tal es así que la exgobernadora mantiene un doble discurso que resulta hasta cínico, manifestándose públicamente en favor de la reforma judicial que impulsa el presidente Alberto Fernández a nivel nacional, en paralelo rechaza el proyecto enviado por el Superior Tribunal de Justicia de la provincia de Tierra del Fuego para su tratamiento legislativo.
Rosana Bertone manifiesta públicamente su preocupación por la paridad de género en los fueros judiciales, sin embargo cuando le toco tomar definiciones desde el poder factico no solo no mostro ninguna preocupación sobre el tema, sino que además fue participe del nombramiento de 20 jueces provinciales, de los cuales tan solo 3 fueron mujeres, lo que equivale apenas al 15% de los nombramientos. Al parecer en aquel entonces la cuestión de género no resultaba tan importante para la ex gobernadora, que incluso en su propio gabinete sostenía una mayoría en favor del género masculino.
Durante el corto mandato de Rosana Bertone se cubrieron 10 cargos de juez que por entonces se encontraban vacantes, pero además se crearon 11 nuevos cargos de juez, con lo cual durante la penosa era Bertonista se nombró al 44% del total de los jueces que actualmente tiene la provincia.
Fueron en total 6 camaristas en Ushuaia creados durante el gobierno de Bertone, 1 camarista en Rio Grande, 2 jueces laborales, 2 jueces de instrucción, 2 jueces de ejecución penal, 1 juez electoral, 2 jueces civiles, 2 jueces de familia en Rio Grande y otros dos jueces de instrucción en Rio Grande. Además, se designaron dos jueces más en los tribunales de juicio en Rio Grande y Ushuaia.
De toda esta superestructura creada durante la gestión Bertone para copar el poder judicial de la provincia, solo 3 mujeres alcanzaron el cargo de juez lo que echa por tierra de manera contundente la supuesta pretensión de defensa de igualdad de género que pretende defender la exgobernadora.
