Una única regla: los celulares, apagados. Así comenzó este viernes el “retiro espiritual” de los funcionarios de Mauricio Macri en el chalet de veraneo de Chapadmalal, a 23 kilómetros al sur de Mar del Plata, con el objetivo de analizar las metas del próximo año.
Desde las 8 de hoy, expusieron el titular del Plan Belgrano, José Cano, sobre las obras de infraestructura programadas, y el ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay.
Está previsto que hablen con la prensa, cerca del mediodía, los ministros de Interior, Rogelio Frigerio, y de Seguridad, Patricia Bullrich.
Anoche, en el quincho principal del sector presidencial dentro del complejo turístico de Chapadmalal, el jefe de Estado antes de la cena compuesta por pescado y mariscos les marcó la agenda del desarrollo del encuentro y les prohibió el uso de los celulares.
El jefe de Estado quiere que sus funcionarios corten toda función laboral, ya que las segundas líneas siguieron trabajando desde Buenos Aires. Además, la segunda intención del jefe de Estado al prohibir el uso de móviles en Chapadmalal es que los ministros frenen todo diálogo con periodistas, para que no se filtre ningún radio pasillo.
