La provincia busca construir un Polo Logístico Antártico, para dar servicios a terceros países en el continente blanco. EE.UU. hizo saber su preocupación por la presencia china en su “zona de influencia”.
El proyecto para construir en Ushuaia un Polo Logístico Antártico con financiamiento de capitales de China quedó frenado por presión de los Estados Unidos
Así lo admitieron fuentes de la provincia que gobierna Gustavo Melella, que había avanzado en interesar a los chinos (sus reuniones en la embajada china fueron públicas) y también a Rusia, en este proyecto.
El financiamiento chino está, pero como le pasa al GPS, el gobierno de Melella tuvo que “recalcular” y busca ahora capitales del sector privado nacional porque “sin apoyo del gobierno nacional no podrán avanzar”. “Lo de China está stand-by” se lamentan desde la provincia más austral.
En abril, la preocupación de Estados Unidos por este desembarco chino fue planteada al presidente Alberto Fernández en una reunión de alto nivel muy esperada, la visita del enviado de Joe Biden, Juan González, a Buenos Aires.
Fernández, como señaló Clarín entonces, negó que fuera a haber bases militares extranjeras en el país. Hubo otra señal de Washington días antes: el jefe del Comando Sur, almirante Craig Faller en su visita a Argentina viajó especialmente a Ushuaia -donde el gobernador Melella no quiso estar para recibirlo. En la provincia explican que para el mandatario en cuya jurisdicción están también las Malvinas, es indigerible el apoyo norteamericano a los británicos en la guerra de 1982, tanto como que hace unos meses el Comando Sur sumó un submarino a ejercicios navales con los ingleses en las Islas.
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Pero las autoridades del municipio local de Ushuaia comandadas por el camporista Walter Vuoto decidieron recibir al almirante norteamericano con alfombra roja.
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En la isla las autoridades del gobierno provincial no tienen duda de que la visita del almirante Faller a Ushuaia tuvo que ver con este tema. En su estadía en Argentina, el jefe del Comando Sur dio una larga entrevista al sitio especializado de defensa, DEF, en que no sólo criticó la pesca ilegal china en el Atlántico Sur sino que recordó que ante el Congreso norteamericano él consideró a China una “amenaza” a la seguridad de EE.UU.
Sin embargo, en la provincia aseguran que la “presión” de Estados Unidos no necesitó ser militar, sino que hubo un “mensaje económico” en la negociación de la deuda con el FMI que lleva adelante el ministro Martín Guzmán, y en la que necesita el apoyo de Washington.
“No es una base militar, pero en términos geopolíticos es una inversión de bandera y Estados Unidos ve esta área como su zona de influencia, con lógica de guerra fría, ahora con China” dijeron las fuentes involucradas directamente en las negociaciones con los inversores, y con los ministerios nacionales que deben intervenir, como Defensa, y Desarrollo Productivo. Impulsando el Polo, Melella se reunió con los ministros Agustín Rossi y Matías Kulfas en marzo, antes de la visita de los norteamericanos.
El Polo Logístico Antártico es un proyecto de larga data en Tierra del Fuego, para prestar servicios logísticos a bases propias y a las de otras decenas de países que las poseen en la Península Antártica. Implica construcciones, un muelle importante y el traslado de toda la base de la Armada Argentina (el área Naval Austral). Clarín accedió a la presentación del proyecto propio de la Armada, de 46 diapositivas, para construir la Base Naval Integrada, con la mudanza que implica y un costo total final de U$S 360 millones. Esta vez se trataría de confluir con el otro proyecto provincial, el del Polo Logístico.
“El traslado de la base es condición sine qua non y debe hacerse un muelle compartido para un programa antártico”, señala a Clarín Andrés Dachary, secretario fueguino de Malvinas, Antártida e Islas del Atlántico Sur y Asuntos Internacionales. Encargado del proyecto del Polo antártico, Dachary evita polémicas sobre el financiamiento pero admite que ahora buscan “inversores nacionales”.
Dachary lo pone en contexto además de que en 2023 se termina el sub régimen industrial que favorece a Tierra del Fuego (desde ya la provincia espera que se extienda) y que el Polo es una iniciativa clave para “ampliar la matriz productiva” fueguina más allá de la industria textil y electrónica, y el turismo.
Desde el PRO, el ex diputado y vicepresidente del partido en la isla, Gastón Roma sostiene que “los chinos pedían de garantía que si Argentina dejaba de pagar (las obras) podían usufructuar ellos el Polo, de ahí sería la inquietud de EE.UU.”
“Hay un tema geopolítico también, los chinos en su Libro Blanco de la Defensa lo plantean como hipótesis de conflicto porque ellos no fueron parte del Tratado Antártico”. Dice que la política fueguina está a favor del Polo.
De lo que es muy crítico es de la situación antártica argentina, con bases en instalaciones que “se caen a pedazos”, y arremete que la Argentina hace “seudo ciencia”. Dispara grueso: “Nosotros estudiamos conchitas marinas y contamos pingüinos, mientras los demás cuantifican el potencial económico de la Antártida”.
La Argentina coinciden las fuentes consultadas, tiene la gran ventaja de estar -Ushuaia- a 1.000 kilómetros de la Península Antártica. Más cerca que nadie. Y en lo que hay diagnóstico ampliamente compartido es que Chile avanzó mucho más. “La competencia del Polo -dice Dachary- es Punta Arenas, y aparece también un nuevo actor que son los británicos, desde Malvinas”.
“Con la actividad científica estamos muy mal”
Mariano Memolli, médico, conoce la problemática antártica como pocos. Fue director de la Dirección Nacional del Antártico (DNA) de 2003 a 2015 pero desde los 90 era parte del área. Ya fuera de la gestión pero ligado al tema antártico desde su fundación Proantártida, Memolli respalda la idea del Polo Logístico pero sostiene: “El tema es en que forma se hace y con quienes, si es con capitales chinos no puede ser para convertir Ushuaia en puerto de salida de la sobre explotación pesquera china”.
– ¿Entonces, no a la inversión china?
-El financiamiento chino, lo tienen (la provincia). Para mí la política antártica es muy delicada para manejarla con capitales externos, más la posición que tienen los chinos sobre la explotación de recursos antárticos.
-¿Y Chile y los británicos?
– Hay una presión británica para que Ushuaia no crezca, ellos empezaron a dar servicios logísticos desde Puerto Argentino. Y Chile desde Punta Arenas hace mucho. Chile nos aventaja en 20 años. Y en tres años más avanza también en hacerlo desde Puerto Williams.
– ¿Y si se construye el Polo?
– Desde los 90 se trata de llevar la actividad antártica a Tierra del Fuego, pero siempre con mega obras y eso implica un esfuerzo. Yo dejé un plan en etapas. Primero construir viviendas para trasladar a la gente de la parte antártica (a Ushuaia). La decision política de hacerlo está pero hay culopesadismo.
-¿Cómo está la actividad científica?”
-La Argentina tiene que mejorar, estamos muy mal en ese punto, muy rezagados. La conducción del tema antártico en la Argentina está muy atomizada, todos hacen cosas pero no en conjunto, está Defensa, con las fuerzas armadas que dan la logística, la Cancillería… No hay una institución rectora de la actividad que antes era la DNA.
Fuente: Clarin
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