El obispo en un triste comunicado desconoce la identidad civil en un matrimonio

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El casamiento por iglesia de un hombre y una mujer trans en el sur del país ya levantó polémica. El obispo de Santa Cruz y Tierra del Fuego, monseñor Jorge García Cuerva, afirmó este domingo que desde la sede episcopal de la diócesis de Río Gallegos, no se autorizó esa celebración y que «el sacerdote en cuestión ya fue advertido convenientemente«.

Victoria Castro, una mujer trans de 46 años, contrajo enlace con Pablo López Silva, de 54. Ya se habían casado por civil el 8 de diciembre de 2011. A pesar de ser ambos religiosos practicantes, fueron alejándose de la Iglesia a medida que les impidieron actividades como comulgar o confesarse.

Tras la ceremonia la Diócesis de Rio Gallegos, a cargo del monseñor Jorge Garcia Cuerva emitió un duro comunicado.

La reacción del Obispado, resulta distante de la postura del Papa Francisco, quien el año pasado se manifestara en favor del matrimonio igualitario.

La mujer trans, que llevó en la mano un ramo de flores y un lazo con los colores del orgullo gay, afirmó que su condición no implica «ni perder la fe ni dejar de ser hijos de Dios».

«Si esta familia que tenemos con Pablo no fue construida desde el amor y con la mano de Dios, entonces que me digan dónde está Dios. Porque Jesús miraba a las personas más allá de su condición. Esa es la iglesia que queremos», fundamentó Castro.

En la misma línea, el párroco Fabián Colman sostuvo en su homilía que «la Iglesia es de todos, y cuando digo todos, son todos«.

Lo cierto es que la polémica esta planteada y abre una grieta dentro de la propia iglesia católica.

“LA LEY DE MATRIMONIO IGUALITARIO LLEGÓ PARA DARNOS MÁS DERECHOS Y POSIBILIDADES”

 

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