La nueva aplicación furor es FaceApp, que te envejece en cuestión de segundos. Sin embargo, hay un cierto “peligro” con respecto a esta plataforma que fanatizó a todo el mundo.
La app permite agregar o quitar años a las personas, en las propias selfies o en una foto sacada en el momento. Te agrega arrugas, canas, papada y mucho más. Sin embargo, tendría un segundo fin, más oculto.
¿Qué información personal “roba” FaceApp?
Su creador es Yaroslav Goncharov, un experto ruso. Para lograr la foto, primero la aplicación te pide que se le dé permiso a los datos del usuario. Luego, no se sabe qué se hace con esa información.
Según informó el medio iProfesional, en la política de privacidad de FaceApp, el contenido recolectado de cada persona comprende fotos, videos, comportamiento, cookies e identificadores para proveer publicidad personalizada.
No obstante, reafirma que no se venderá ni compartirá la información de cada usuario a terceros, pero sí pueden acceder a ella personas que estén vinculadas legalmente al mismo grupo de empresas de FaceApp. También tienen vía libre a los datos los “proveedores de servicio”: ellos tienen acceso a la ubicación, identificadores del dispositivo y archivos de registro.
Para concluir, FaceApp indica que todo esta información es almacenada y procesada en Estados Unidos y en otras regiones de la compañía. Sin embargo, es posible que todo esto se transfiera a otro país, donde las leyes que rigen la recopilación y uso de datos no sean las mismas.
