La bolsa de agua caliente es un elemento tradicionalmente muy utilizado, tanto para aliviar el frío en invierno de una forma sencilla, como para tratar dolores de cintura, espalda y musculares en general.
Sin embargo, muchas veces un método tan sencillo puede olvidarse. Para calefaccionarnos utilizamos estufas que gastan electricidad o gas; y, del mismo modo, para tratar los dolores, solemos recurrir a medicamentos. En estos casos, es bueno tener las bolsas de agua caliente en cuenta.
Pero también, si no tienes una justo cuando la necesitas, o si van a usarla los niños, puedes hacer, en pocos minutos y con materiales que tienes en tu casa, tu propia bolsa de arroz, que podrás utilizar de la misma manera.
Materiales
- Una media
- Arroz
- Una bandita elástica
- Aceite esencial de lavanda u otro (opcional)
Procedimiento
Llená la media con arroz y cosé el otro extremo, o atalo con una bandita elástica bien apretada.
Si querés, podés antes mezclar el arroz con dos gotas de aceite esencial de lavanda u otro aceite relajante que te guste, para disfrutar de los beneficios de la aromaterapia.
¿Cómo usarla?
Calentá tu bolsa: podés meterla en el microondas o colocarla en la secadora o en una olla a baño maría (en una olla seca que esté encima de otro recipiente con agua caliente).
Si querés aliviar dolores musculares, aplicá la almohadilla caliente sobre la zona afectada. Podes hacer una almohadilla más larga para colocar alrededor de tu cuello reciclando unas medias largos, o hacer bolsitas pequeñas para aplicar fácilmente en otras partes del cuerpo.