Cada vez más los turistas de todo el mundo buscan experiencias novedosas y alejarse un poco de los circuitos tradicionales que ofrece la industria del turismo. Y es con esa premisa que los hermanos Frank y Patrik Riklin crearon Null Stern Hotel.
Se trata de una propuesta tan novedosa como sorprendente. Null Stern Hotel propone a sus huéspedes dormir al aire libre y bajo las estrellas en los Alpes suizos.
La experiencia es una de las características que las personas buscan en sus viajes, vivencias únicas y diferentes que les permitan salir de la rutina, como el caso de varios hoteles que se apropiaron de la cultura, tendencias y costumbres de cada uno de los lugares donde se encuentran.
Los hermanos Frank y Patrik Riklin decidieron modernizar el concepto de un alojamiento que no cuenta con paredes ni techo, solo de una cama doble con dos mesas de noche, en el valle de Safien, en Suiza.
Las vistas increíbles que están rodeadas de naturaleza, la noche estrellada desde la cama y el servicio de un camarero que servirá un desayuno en la “habitación”, son vivencias que captaron la atención de los turistas.
“Deseamos que los huéspedes vuelvan al centro del proceso creativo y, al mismo tiempo, superamos los límites de la industria hotelera. También estamos tratando de repensar el concepto de bienes raíces en el modelo de hospitalidad tradicional”, comentó el gerente del lugar, Daniel Charbonnier.
Charbonnier explicó de dónde surgió la idea: “Esta nueva versión en medio del valle mantuvo la misma esencia, pero esta vez nos deshicimos de todas las paredes y lo único que queda es el pasajero y su experiencia”.
Según la página web del sitio, se considera como un hotel conceptual. El nombre de este tipo de alojamiento busca diferenciarse de los hoteles modernos y convencionales que se encuentran en todo el mundo. Los diseñadores de este lugar explican que cada uno de sus huéspedes es parte de la obra de arte, que es como se presenta esta propuesta.
Las zonas donde están ubicadas estas habitaciones son estratégicamente seleccionadas para que el entorno tenga lo necesario que los hermanos buscan ofrecer a sus clientes.
Los agricultores locales son quienes también trabajan como mayordomos en el hotel, usan una camisa blanca elegante con corbatín, además de unas botas para que se puedan desplazar en las habitaciones y ofrecerles a los huéspedes el servicio del desayuno que está hecho con productos que se cultivan en esa misma zona.
La seguridad es una de las cuestiones que más pueden temer los interesados en esta aventura. Sin embargo, Charbonnier afirmó que cada una de las suites cuenta con seguridad personal y que hasta el momento los principales intrusos han sido ardillas, vacas y pájaros.
Recientemente el hotel estrenó una nueva habitación llamada ‘Anti Idílico’ con un concepto del cielo caído como si fuera un error de la Matrix. El enfoque de la estadía es poder reflexionar sobre la situación mundial actual. “Se convierte en una declaración de la urgencia de los cambios necesarios en la sociedad”, explicaron los artistas de este concepto durante la inauguración de este lugar.
“La suite ‘anti idílica’ nos refresca nuestras dudas e inseguridades. Espero que inspire a los invitados a reflexionar y compartir sus pensamientos, que luego clasificaremos y cotejaremos para desarrollar acciones locales en el futuro”, explicó el alcalde de Saillon, Charles Henry Thurre, en un comunicado oficial
