Olimpo es de la A

Olimpo le ganó 3 a 0 a Aldosivi, mantuvo la categoría y mandó al Tiburón a la B Nacional. Coniglio, de un doblete, y Cabalucci metieron los goles del Aurinegro, en un partido que estuvo suspendido por corte de luz. Los marplatenses apenas aguantaron dos años y medio en la elite.

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Olimpo lo consiguió, después de luchar todo el campeonato, en la última fecha concretó su objetivo de mantenerse en Primera. El contundente 3 a 0 ante Aldosivi le dio el tremendo alivio al Aurinegro, al tiempo que enterró la ilusión del Tiburón por mantenerse en la categoría. Insólitamente, el equipo marplatense había estado fuera de la zona roja hasta la anteúltima fecha, pero pagó el costo de aquellas siete derrotas consecutivas y fundamentalmente de su falta de gol, apenas 15 en 30 fechas, un déficit ratificado en su despedida de la máxima categoría.

La permanencia de Olimpo tuvo figuras muy claras. La principal fue Coniglio, autor de dos goles consecutivos en el primer tiempo, en el que contó con la complicidad de fallas groseras de Aldosivi, por Galván y Alegre. Así, de golpe, en contraataques contundentes, el Aurinegro sintió que tenía asegurada la categoría, mientras que los marplatenses, con esfuerzo, amor propio y mucho espíritu, y por momentos soportando las amenazas de su hinchada, fueron para adelante pero chocaron con su impotencia y con un seguro Gabbarini, otro punto alto de los bahienses.

Para Olimpo la continuidad en Primera estaba garantizada y en Aldosivi sólo soñaban con un gol de Vélez que provocara un desempate con Temperley. Esperó un favor de terceros cuando durante buena parte de la temporada no hizo los deberes mínimos.

El equipo de Sciacqua liquidó todo con otra contra, esta vez con golazo de Cabalucci. Un corte de luz alargó la agonía marplatense. Hubo un parate de más de media hora, tiempo en el que se concretó el empate del Gasolero en Liniers y para los jugadores de Perazzo fue una tortura salir a jugar lo que quedaba por una utopía de meter tres goles. ´

Una situación especial vivió Campodónico: el veterano arquero jugó por Vega, quien había acumulado groseros errores en las derrotas frente a Boca y River. Es fanático del Temperley, su ex equipo, y hasta tiene un tatuaje del Gasolero. Este lunes recuperó la titularidad y su objetivo de salvar al Tiburón estaba en colisión con lo del Celeste.

Conmovió el dolor de los marplatenses al final.  La sensación es que a Aldosivi le va a costar mucho reintegrarse a la Primera División. Delirios como el torneo de 30 equipos no pueden repetirse, lo que anula cualquier chance de otro escenario de ascensos masivos como el del 2014. 

Un aplauso para Olimpo. Porque jugó con la personalidad suficiente para mantenerse en Primera. Y porque sobre el final varios de sus jugadores fueron a consolar los llantos de los jugadores del Tiburón.

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