El azúcar refinado o “de mesa” es un producto que solemos tener en nuestras casas. Sin embargo, sólo lo utilizamos para endulzar alguna bebida, o bien a la hora de cocinar una torta, por ejemplo.
Existen otros usos además de los ya mencionados que pueden beneficiar tu salud porque la sacarosa tiene propiedades curativas. Por ejemplo, sirve para tratar heridas ya que facilita la cicatrización y alivia el dolor.
También se utiliza como exfoliante natural para la piel y los labios resecos. Sólo basta con agregar unas gotitas de limón a un puñado de azúcar y generar una textura homogénea y consistente. Al retirarlo sentirás una sensación de frescura única.
Si aquella prenda de vestir que tanto te gusta se manchó con grasa, no te preocupes ya que podés salvarla. ¿Cómo? Prepará una pasta con azúcar y agua. Luego, aplicá directamente y dejá que actúe durante por lo menos una hora. Eso sí: ¡a no olvidarse de enjuagar!
Por último, si tu jardín está algo descuidado, mezclá tres cucharadas de azúcar con dos de vinagre y un cuarto de agua tibia. Colocá el preparado en la tierra, pero alrededor de las plantas para evitar las bacterias y que los tallos se alimenten.
Estos son sólo algunos de los tantos “trucos” que existen; es cuestión de animarse y probar. Como dice una frase popular: “Si no te gusta, échale azúcar”.