La planta de aloe vera tiene grandes beneficios para la piel. Como es 96-98% de agua, es un humectante natural, hidrata y rejuvenece la piel. Además, ayuda a tratar las infecciones e inflamaciones, lo cual la convierte en una planta súper versátil.
Acá te mostramos 3 maneras fáciles para usar el aloe vera en todo tipo de pieles:
En pieles grasas: contrariamente a lo que se piensa, este tipo de pieles también necesitan hidratación: probá con una máscara de aloe vera y miel que, además, te va a servir de anti-bacterial.
Ingredientes: aloe vera, miel
Pasos a paso:
1) Extraé el gel de unas cinco o seis hojas de aloe vera.
2) Licualo en la licuadora.
3) Agregale 15 ml de miel y mezclá.
4) Aplicate la mezcla en la cara por 20 minutos y enjuagate normalmente.
Pieles mixtas: Si tenés piel mixta, probá nutrirla con una mezcla de aloe vera y agua de rosas.
Ingredientes: aloe vera, agua destilada de pétalos de rosa.
Paso a paso:
1) Extraé el gel de unas cinco o seis hojas de aloe vera.
2) Herví cuatro rosas con una taza de agua y esperá que se enfríe.
3) Licuá los dos ingredientes juntos.
4) Aplicate la mezcla en la cara todas las noches.
5) Guardala en la heladera para mejores resultados.
Pieles secas: El aloe vera es una gran forma de hidratar tu piel naturalmente. Agregándole yogurt, vas a darle a tu piel la humectación extra que necesita.
Ingredientes: yogurt neutro, aloe vera
Paso a paso:
1) Extraé el gel de unas cinco o seis hojas de aloe vera.
2) Mezclalo con 15 ml de yogurt neutro.
3) Licuá ambos ingredientes hasta que obtengas una mezcla de consistencia líquida.
4) Aplicá y dejá actuar por 10 minutos.
5) Enguajate la cara como lo hacés normalmente.